Para los padres y madres de familia la prioridad número uno siempre será la felicidad y el bienestar de los niños. No es para menos: el mundo es muy grande y está lleno de riesgos… sobre todo cuando de enfermedades se trata. Es por eso que acudir a tu Unidad de Salud más cercana para que un médico determine una estrategia para continuar el esquema de vacunación de tu bebé es la mejor solución.
¿Cómo proteger a los niños de enfermarse?
Todos tenemos un sistema inmunológico que nos protege de las enfermedades. En el caso de los bebés, la situación no es diferente. Después de nacer, la leche materna cumple la función de fortalecer a corto plazo el sistema inmunológico del bebé, pues le proporciona las defensas que necesita para sobrevivir. Sin embargo, a largo plazo estas defensas no son suficientes para protegerlo de diversos virus y bacterias.
Es en este punto donde entran las vacunas: Al administrarse, activan las defensas naturales del organismo para que estas aprendan, reconozcan y puedan combatir a agentes infecciosos.
La vacuna hexavalente es el mejor ejemplo, pues su administración inicia a los 2 meses de edad y continúa con 3 dosis más a los 4, 6 y 18 meses. Las enfermedades que previene son: hepatitis B, tos ferina, poliomielitis, tétanos, meningitis por haemophilus influenzae tipo b y difteria.
¿Qué pasa si retraso o interrumpo el esquema de la vacuna hexavalente?
Para proteger a los niños desde una edad muy temprana, se realiza un calendario de vacunación con el propósito de proveerles de cierta inmunidad antes de que puedan exponerse a una enfermedad que ponga en riesgo su vida.
Recordemos que, si bien nuestro continente ya fue declarado libre de la enfermedad de la poliomielitis, hay otras que aún pueden afectar el bienestar de los niños no vacunados, como es el caso del tétanos y la hepatitis B.
Además, la aparición de un brote de poliomielitis en Pakistán nos hace conscientes de que el riesgo no ha desaparecido. Hay que recordar que, en este país y en Afganistán, la poliomielitis sigue siendo una enfermedad endémica.
Es por eso que interrumpir el esquema conlleva un riesgo muy grande, pues deja a los niños y niñas expuestos a infecciones durante el tiempo en que se demoraron o no se aplicaron las 4 dosis indicadas de la vacuna hexavalente.
Pero no te preocupes, nunca es tarde para comenzar y reanudar el esquema de vacunación de tu pequeño. Para hacerlo, lo primero que te recomendamos es consultar con tu médico de confianza en tu Unidad de Salud más cercana para que determine la estrategia más adecuada.
Recuerda que la mejor herencia que podemos dejarle a nuestros niños es una buena salud. Fomentemos entonces una infancia feliz, de sano desarrollo y sin el riesgo de enfermar de gravedad a causa de enfermedades que son prevenibles con la vacunación.
https://www3.paho.org/hq/index.php?option=com_content&view=article&id=9328:breastfeeding-benefits&Itemid=42403&lang=es#:~:text=La%20leche%20materna%20est%C3%A1%20llena,no%20est%C3%A1%20del%20todo%20maduro.
https://www.who.int/es/news-room/questions-and-answers/item/vaccines-and-immunization-what-is-vaccination?adgroupsurvey={adgroupsurvey}&gclid=CjwKCAiAg6yRBhBNEiwAeVyL0FAzFGn4-me_EO3hOVSm2IHoGhxLLFVKY7jHsWy7A6PdNAcOw9zsqRoCj60QAvD_BwE
https://www.paho.org/es/temas/poliomielitis
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https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/hepatitis-b
https://www.paho.org/es/noticias/23-2-2022-ops-urge-aumentar-vacunacion-contra-poliomielitis-ninos-americas
https://www.cdc.gov/vaccines/parents/FAQs-sp.html